1920-1954
En el seno de una de las familias de mayor abolengo, nació don Manuel Mestre Ghigliazza en San Juan Bautista, hoy Villahermosa, el 15 de noviembre de 1870. En esa ciudad realizó sus primeros estudios y los concluyó en el Instituto Campechano. En 1889 se trasladó a la ciudad de México para proseguir su carrera en la Escuela Nacional de Medicina, profesión que eligió, por propia confesión, no por ser la que más le agradaba, sino por la que menos le disgustaba, dado que sus preferencias eran por la historia y la poesía, pero cuyo ejercicio no le permitía vivir.
Después de obtener su título en 1898, casó con la campechana Rosario McGregor y se radicó en su ciudad natal para ejercer su profesión. Durante el tiempo que la ejerció, desarrolló una callada labor de consulta gratuita a los indígenas y publicó un estudio Breves sobre la enteritis infantil.
Como muchos otros tabasqueños, desde muy temprano había dado muestras de un radicalismo radical teñido de anticlericalismo y, de acuerdo a los aires imperantes, de cientificismo. La publicación de artículos en El Monitor Tabasqueño lo fue inclinando a la política, interés que se convertiría en dominante y que, al final, lo conduciría a abandonar su profesión de médico.
No tardó en dar muestras de convicciones antiporfiristas, lo que lo llevó a reunirse con otros doce intelectuales que las compartían y a decidirse a difundirlas. Colectivamente redactaron unas hojas sueltas con el título de El verdadero Juárez. Por nuestros principios y Última palabra y su publicación los inauguró en la política. La primera apoyaba la obra de Francisco Bulnes y las otras dos, un ataque a la dictadura de Díaz y al gobierno local de Abraham Bandala, por lo que no es de sorprender que los doce terminaran con sus huesos en prisión.
No obstante, en 1902, el influyente «científico» don Joaquín Casasús consiguió que don Manuel fuera elegido diputado suplente para el Congreso de la Unión. A la caída de la dictadura, iba a ser designado gobernador de Tabasco interino en 1911 y meses después electo propietario para el periodo que debía terminar a fines de 1914.
Es curioso que después del golpe de estado contra don Francisco I. Madero en febrero de 1913, se decidiera por el reconocimiento del régimen de Victoriano Huerta. Esa circunstancia haría que no tardara en ser desconocido y su gobierno fuertemente criticado. Seguramente forzado por ese hecho, decidió radicarse en la capital y para consolarse de su nostalgia, según diría más tarde, «me entregué a los trabajos de historia local tabasqueña».
Poco a poco se fue retirando de la política, aunque en 1919 todavía utilizó su pluma para apoyar la candidatura de Álvaro Obregón en sus artículos de El Universal. En 1915 fue nombrado inspector de crédito y en 1921 ejerció el puesto de regidor de] Ayuntamiento capitalino.
Pero se había iniciado su carrera burocrática, ya en gran medida relacionada con la vida cultural y en 1916 fue nombrado primero jefe de la Sección de Investigación Histórica y Búsqueda de Documentos del Archivo General de la Nación y en 1917, oficial mayor del mismo, lo que le facilitaría el seguir su vocación primera.
Nombrado director de la Biblioteca Nacional por don Adolfo de la Huerta, desempeñó el cargo de 1920 a 1926. Sirvió en otros puestos públicos: director de la Lotería Nacional y de la Biblioteca de la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Hizo incursiones en el periodismo a lo largo de su vida. Inició diversas publicaciones periódicas que no tuvieron suerte: en 1905 Ariete, en 1906 Revista de Tabasco y en 1908 El reproductor tabasqueño. Este último periódico lo conduciría nuevamente a prisión.
La mayoría de sus obras aparecieron bajo diversos seudónimos. Entre ellas destacan las dedicadas a la intervención francesa y el imperio de Maximiliano. En 1907 apareció su Archivo histórico y geográfico de Tabasco: documentos y datos para la historia de Tabasco, cuyo cuarto volumen vería la luz en 1940. En 1931 publicaba Las relaciones diplomáticas entre México y Holanda; en 1934, Los gobernantes de Tabasco, desde la consumación de la independencia en 1821 hasta 1914; en 1945 Efemérides biográficas y en 1947 La invasión norteamericana en Tabasco, 1846-47.
También publicó poemas, entre los cuales se encuentran Flores de sombra (1907), La amiga de Gambetta (1908) y Cantos a Blanca (1909).
Electo miembro de Número de la Academia Mexicana de la Historia en 1920, murió en la ciudad de México el 2 de febrero de 1954.
Josefina Zoraida Vázquez.